Caso Nazareth Marín: los asesinos celebraron su muerte en Catia
El Diario Tricolor -.Nuevas revelaciones sobre el caso de Nazareth Marín dicen que los asesinos celebraron su muerte en una tasca ubicada en Catia. El periodista Eligio Rojas compartió este viernes un dossier de la Fiscalía con detalles sobre la muerte de la venezolana, destacó El Nacional.
El asesinato de Marín de 27 años, quien trabajaba en el Senamecf de la Morgue de Bello Monte, consternó a los venezolanos cuando las autoridades hallaron su cuerpo en una playa de La Guaira con muestras de violación sexual.
Hasta los momentos, el Ministerio Público determinó que cinco personas tuvieron participación en su muerte, entre ellas dos funcionarios del Cicpc. Los otros tres victimarios son supuestos amigos de la joven, quienes viajaron con ella a la playa.
Según la información, Nazareth viajó por invitación de Keisler Pérez (detective del Cicpc) a playa Los Ángeles. Junto a ellos se trasladaron Derwin Ruíz y una mujer identificada como Miller Ochoa. Cuando estuvieron en la playa se unieron a Kenny Díaz, su esposa e hijos. Según el informe los presentes consumieron bebidas alcohólicas y estupefacientes (tusy).
Según la redacción de Noticiero Digital, a las 8:30 pm Nazareth desapareció sin dejar rastro. Ochoa, estableciendo su coartada, comunicó al resto que la joven había desaparecido. Aunque todos conocían su paradero.
La desaparición de Nazareth solo generó risas entre sus amigos, quienes, sin hacer intentos por buscarla, declararon que seguramente estaría con otro.
Mientras que a las 10:00 pm presuntamente los ciudadanos Ochoa, Pérez, Ruíz y Díaz salieron de La Guaira y se dirigieron a Caracas. Al llegar a Catia, ingresaron a una tasca de nombre “El Charro Azul”. En el lugar permanecieron celebrando la muerte de Marín hasta las 4:00 am, según información de la Fiscalía.
El lunes la madre de Nazareth llama a Pérez y pregunta por su hija, ya que no regresó a casa. Asimismo, le pide que la lleve a la playa en la que desapareció para ejercer la búsqueda, a lo que Pérez accedió para mantener su coartada.
Alexander Ventura, jefe de la División de Homicidios del Cicpc en La Guaira presuntamente conocía lo que había sucedido e interfirió en el caso para proteger a los autores del crimen. Finalmente, la Fiscalía accionó ante esto e imputó a los participantes del hecho.