Exposición, arte y música
Por : José Lunar Lira
El Club Italo de Cabimas, a falta de un espacio: «sala de exposiciónes» en una ciudad donde se han formado y se forman grandes talentos de la creación artística; de referencia nacional e internacional, ha sido escenario recientemente de tres solemnes colectivas de pintura que han trascendido a ciudades del mundo con importantes juicios de calificados críticos de arte.
En el mes de octubre se llevó a efecto una exposición en honor a la «Vírgen del Rosario», en el mes de diciembre, una muestra de imágenes de «San Benito», Patrono de la COL, y con fecha 22 de febrero la magia de la luz y los colores brillaron en una sala donde el «arte y la música» le dieron vida a lo humano, como lenguaje de un sentimiento universal. En esta interesante exposición participaron 27 artistas plásticos, con obras que exigían un espacio a la altura de su valor.
Este significativo proyecto ha sido posible a la dedicación, voluntad y esfuerzo del artista plástico Cesar Rondón, presidente de la Fundación «Raíces Creadoras», con el apoyo de la Dra. Damaris Velasquez y de la directiva del Club Italo – Cabimas, presidida por el Dr. Mario Caberlin y la Lcda. Esther Riganti, en la secretaría de cultura.
Se destaca la organización de la fundación cultural en referencia y la motivación y perseverancia de los artistas que afrontan limitaciones para el desarrollo de sus actividades; valga señalar la inexistencia de enseñanzas para los nuevos valores, máxime de contar con una Escuela de Artes Plásticas que en acto está en abandono desde hace más de una década. Asimismo, la carencia de una galería de arte ya que desde el año 2007, luego del proyecto de modernización de la Plaza Bolívar, se demolió el complejo museográfico a la altura de los mejores de Latinoamérica y desde esa fecha, transcurridos 17 años, los artistas cabimenses no gozan de una galería de arte para exponer sus obras, hoy cotizadas en diferentes mercados. El arte es la contemplación del mundo y la cultura no descansa sólo en la «recreación»… Es integral: formativa en todas sus disciplinas; es la categoría junto a la educación que culturiza y humaniza al ser social.
Dice el poeta mexicano Octavio Paz: «somos tiempo y el tiempo se nos acaba», un pensamiento para la reflexión. No esperemos que en las páginas de la historia de Cabimas, un poeta o cronista escriba «pasaron como viajeros que van sin rumbo con las maletas vacias»; por ello el mejor juez es el tiempo, es el que determina el valor de la siembra.
Es bíblico este mensaje «hay que sembrar con el corazón para cosechar con el alma». El mejor estímulo y reconocimiento para el que deja una obra y de allí el valor de quién lo ejecuta es la admiración y el «respeto» de la ciudadanía.
Felicitaciones a todos los que contribuyen y participan en el embellecimiento de la ciudad y muy especialmente a los artistas, intelectuales quienes son los estimuladores de la conciencia indispensables en los procesos de transformación que a través de la historia, han mejorado la condición humana.
Filósofo /