Así fue Lenín Pulgar, el compositor romántico más prolífico de la gaita
El Diario Tricolor-. El fundador de Amor y Gaita, autor de más de 120 temas dedicados al amor y desamor en su carrera, falleció este domingo 7 de enero en Orlando, EE.UU, víctima de un cáncer prostático. Moraima Gutiérrez, “La Tía Mora”, y Ramón Soto Urdaneta, “El Zulianísimo”, periodistas, locutores y amigos, se refirieron a su legado musical y destacaron su caballerosidad y sazón para la cocina zuliana.
Un profundo vacío. El Zulia y Venezuela perdieron la mañana de este domingo 7 de enero, en Orlando, Florida, Estados Unidos, a Lenín Pulgar, el compositor romántico más prolífico de la gaita y fundador de la agrupación Amor y Gaita. “Hasta pronto, amigo Lenín. Sincero abrazo desde la distancia a sus hijos, nietos, amigos y admiradores de su obra musical. Gracias a Dios por su vida, descendencia y su legado para las nuevas generaciones”, escribió Moraima Gutiérrez, “La Tía Mora”, periodista, radialista y amiga del productor y comerciante.
Pulgar nació en 1951 en Maracaibo y comenzó en la gaita a los 16 años al intentar formar las agrupaciones Los Misteriosos y Universal, detalló una publicación de la firma de León Magno Montiel, periodista. “Su primera composición fue Linda ilusión, tema que interpretó e impuso Fernando Rincón en 1980 con Rincón Morales y dos años después fundó Amor y Gaita, organización con la que grabó 10 discos y más 120 canciones”, detalla.
En conversación con Versión Final, Ramón Soto Urdaneta, locutor, productor y periodista gaitero, contó que Pulgar venía desde hace unos 7 años sufriendo problemas con un cáncer de próstata, pero que igualmente le sorprendió.
En diciembre pasado se notaba recuperado. Tanto que hizo hallacas, que eran muy buenas. Él siempre fue buen cocinero. De hecho, cuando lo conocí me llevó a El Hatajo, una pequeña finca que tenía”.
Allí, además de restaurante, era un espacio para la presentación de grupos gaiteros. Urdaneta detalla que ya antes de ese encuentro, habían conversado cuando trabajaba para Radio Selecta. Eran los días en los que el disco de Rincón Morales de 1980, con Canturreando, Anhelo gaitero y Linda Ilusión, uno de sus temas más recordados, en la voz de Fernando Rincón.
«Chavín estaba en Radio Selecta y yo era uno de sus co-productores en Gaiteando con Selecta. De Lenín puedo decir pudiera decirte que no fue el primer compositor de gaitas románticas, ya antes (Abdénago) “Neguito” había sacado Sin Rencor que, aunque es de desamor, toca el elemento romático. Y otras que nacieron mucho antes como Nuestra Serenata, con Nerio Ríos y los Cardenales de Rafael Rincón González”, sostiene.
Lo que sí hizo Pulgar, según Urdaneta, fue darle el impulso y fue esa su tónica permanente. “No se dedicó a otra cosa que no fuese a componer la gaita romántica, la gaita por la vida, verbigracia Lluvia de Plata, que es un ejercicio de amor a través de la composición. Una gaita que se hizo eterna como él. Lluvia de Plata, en la voz de Astolfo Romero es una belleza”:
Recuerdos gratos de mi niñez / En el barrio donde me crie / Percibo el aroma del cafesito / Que mi abuelita hacía en la fogata / Iba al jardín a regar la flor / A la que le hablaba con tanto amor / Mientras escuchaba los jovencitos / Como ensayaban sus serenatas / La vida es preciosa / Tiene las manitas blancas / Y sus pecas son de rosas / La vida hay que vivirla para sentir / Que es hermosa / Cuando uno quiere a la vida / La vida es con uno celosa”.
En opinión del comunicador y cultor gaitero, Pulgar siempre se mantuvo en esa tónica. “Con Amor y Gaita tuvo un éxito impresionante a nivel nacional por varios años. Y él se fue hace un tiempo a Orlando, Florida y fallece en horas de la mañana de hoy domingo 7 de enero. Fue muy buena persona, muy buena gente. De un trato afable”. De acuerdo con el periodista este lunes será cremado en Orlando.
Urdaneta detalló que trabajó en la Contraloría de la República y desde allí fue muy atento con los gaiteros. A decir de Simón García, de Ricardo Portillo, de Astolfo Romero. De todos esos gaiteros que trataron con él.
Lenín deja una obra realmente importante e indudablemente que es el compositor romántico de la gaita, ahí no hay ninguna duda, porque como te dije, se dedicó a eso. Y cada gaita compuesta era un éxito”.
“El Zulianísimo” recordó que Pulgar integró una familia de músicos en el Zulia: sobrino de Ernesto (el viejo) Pulgar Soto y primo hermano de Edwin. “Qué decir del amigo que se va sino brindar un aplauso sonoro y de luz sacra para él siempre”.
Voces que inmortalizan sus temas
Fernando Rincón, Jesús Terán “Chavín”, Carlos Méndez, Freddy López, Mirla Castellanos, Wilfredo Vargas, Lino Borges, Hugo Huerta, Ángel Sarabia, Misael Sánchez, Lula López, Enrique Gotera y Astolfo Romero, además de agrupaciones como Rincón Morales y la mismísima Billo´s Caracas Boys, inmortalizaron sus temas.
Entre los más recordados se encuentran Linda ilusión, Nunca es tarde para amar, Y tuve que amarte en silencio, Dulce esperanza mía, Vivo esperando por ti, Por qué no llegaste antes, Quiero amar, Lluvia de plata, La felicidad, Que me perdone el perdón y Me enamoré de ti.
Lenín, el romántico, había nacido el 16 de enero de 1951 y no pudo celebrar su cumpleaños 73. Honores al maestro de la composición gaitera romántica”, escribió Montiel en sus redes sociales.
Anécdotas
Moraima Gutiérrez sonríe al recordar. No puede ser de otra manera. Lenín era muy jovial. “Formando parte de la Gaita Antañona, cuando estábamos en Zuliana 102.9, tenía siempre un detalle, una atención, una presencia cordial para con todo el equipo. Nos consentía mucho con sus famosas hallacas. La sazón de Lenín para con la comida zuliana era muy particular. Y sus hallacas eran muy famosas. Tanto que viviendo en Orlando hizo hallacas por mucho tiempo”, detalla.
“La Tía Mora” recuerda una fiesta de Navidad de la desaparecida emisora en el Hatajo, el icónico restaurante de Pulgar.
Aquello fue cantar y reírnos. Cuando lo visitábamos también con mi familia encontrábamos a un hombre servicial y atento. Le encantaba que fuéramos a El Hatajo porque allá estaba a sus anchas. Primero era su restaurante y segundo un rinconcito (su oficina) en la que conservaba su guitarra. ¿Desde allí cuantas gaitas habrán surgido en su imaginario?”, se pregunta.
Gutiérrez consolidó una maravillosa amistad con Pulgar. En los últimos años antes de migrar, cuando faltaban pocas semanas para mayo y junio, Lenín se comunicaba para adelantarle del contenido de la gaita que iba a grabar y más o menos asomarle los nombres sobre los posibles solistas. “Su grupo Amor y Gaita dejó ser un conjunto para convertirse en una marca. No existía, pero todos los años grababa un tema en particular, entonces él me llamaba o me escribía”, precisa.
Una de las cosas que más le gustaban del compositor nacido en el Hospital Central era lo “bonito” que hablaba de la mujer. La periodista y defensora del folclor venezolano destaca que mucha gente decía que Pulgar era muy enamorado.
Una vez en una entrevista le pregunté cuántos amores había tenido, considerando que sus gaitas siempre hablaban del amor y el desamor, y me contestó que el amor era uno solo, pero la belleza, la inteligencia y la empatía con la mujer era lo diferente. Era lo que variaba. Y que él se inspiraba siempre en esas experiencias, en ese trato respetuoso hacia la mujer para componer sus gaitas. Que algunas tenían experiencias vividas, pero otras no tanto”.
La comunicadora rememora un apoyo muy particular que agradecerá siempre. “Cuando Conatel cerró Zuliana 102.9, su hijo dirigía Urbe 96.3 FM, y recuerdo que me llamó un día, a poco tiempo de haber cerrado la emisora, y me preguntó: ¿Te gustaría formar parte de Urbe? Porque Omar (su hijo), te quiere hacer una propuesta. – Sí claro, le respondí… Y efectivamente comencé un programa llamado Al son de Tía Mora los sábados. Eso también se lo agradezco de corazón a Lenín y a su hijo Omar, porque gracias a ellos pude volver al aire tras el cierre de Zuliana 102.9”.
Moraima asegura que siempre mantuvo el hilo comunicante cuando migró a EE.UU., aunque se redujo la frecuencia. “Lamento su cambio de escenario. Le agradezco a Dios la vida que tuvo, que su obra fue prolífica, por sus hijos. Fue un hombre amoroso, preocupado, atento, pendiente de sus hijos, de sus nietos. Y diría también que ‘era amigo de los amigos’. De verdad que en Lerín encontramos a un caballero, que así como cantó, escribió y narró del amor, de la desilusión, del despecho, del guayabo, también le cantó a la vida, como lo hizo con Lluvia de Plata”.
Fuente: Versión Final/